El gobierno de Nicaragua, en colaboración con la Asamblea Legislativa, ha decidido declarar el 19 de abril como el Día Nacional de la Paz. Esta fecha, que coincide con el aniversario de las protestas masivas de 2018, busca promover un mensaje de reconciliación y estabilidad en el país.
El 19 de abril de 2018, miles de nicaragüenses salieron a las calles para manifestarse contra reformas a la seguridad social propuestas por el gobierno de Daniel Ortega. Estas protestas se intensificaron rápidamente, transformándose en un movimiento que exigía la renuncia del presidente. La represión de estas manifestaciones resultó en un trágico saldo de al menos 355 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque otras fuentes elevan la cifra a 684.
La vicepresidenta Rosario Murillo ha destacado que esta iniciativa es un reconocimiento a la paz como un pilar fundamental para el desarrollo y la prosperidad de Nicaragua. Según Murillo, el gobierno se considera un defensor y guardián de la paz en el país, y esta declaratoria es una muestra de su compromiso con la estabilidad nacional.
Mientras tanto, la oposición, especialmente aquellos en el exilio, ha anunciado que conmemorará el 19 de abril como el Día Nacional de la Memoria de las Víctimas, recordando a aquellos que perdieron la vida durante las protestas. En lugares como Costa Rica y Estados Unidos, donde reside una significativa diáspora nicaragüense, se llevarán a cabo actos conmemorativos.
La situación política y social en Nicaragua sigue siendo tensa desde las elecciones generales de noviembre de 2021, en las que Ortega fue reelegido en medio de controversias y con sus principales oponentes encarcelados. Esta nueva declaratoria del Día Nacional de la Paz se presenta como un intento del gobierno de proyectar una imagen de reconciliación y estabilidad, aunque sigue siendo un tema divisivo entre los diferentes sectores de la sociedad nicaragüense.
